La Comisión de Comercio Justo (FTC por sus siglas en inglés) fue la entidad encargada de establecer la sanción récord de 37.300 millones de wones (29,8 millones de euros o 31,9 millones de dólares) a Volkswagen por publicidad engañosa debido al escándalo de falseo de emisiones de la compañía automotriz.
La multa es la más alta de la historia de Corea para este tipo de prácticas. La FTC señaló en un comunicado que Volkswagen realizó anuncios engañosos de sus automóviles en los que le mostraba al público que cumplían los requisitos de emisiones y ofrecían un consumo más eficiente de combustible. Además, para la entidad esta comunicación publicitaria se utilizó entre 2008 y 2015 para los vehículos de la firma alemana, evidenciando que sus motores diésel eran altamente ecológicos y eficientes.
Finalmente, resultó no ser cierta la publicidad, ya que la compañía utilizó un software para falsear las emisiones de sus vehículos en varios países, entre ellos Corea del Sur.
Por si fuera poco, la fiscalía de Corea acusa a Volkswagen de haber falsificado entre agosto de 2010 y febrero de 2015 más de cien informes sobre emisiones, niveles de ruido y eficiencia de combustible de sus automóviles para obtener la aprobación de las autoridades locales.
La multa fue justificada por la entidad coreana ya que a su criterio los consumidores del país asiático están cada vez más preocupados por la contaminación del medio ambiente, especialmente aquellos que viven en los núcleos urbanos más poblados.