En conversación con La Segunda, Raúl Menjíbar dijo que “cometió un error imperdonable” al haber tomado ideas de otro spot para realizar el polémico comercial de la tienda.
“Creo que hicimos lo correcto al asumir todos los costos del error y que esa actitud fue valorada por nuestros clientes”, confesó, en una entrevista con La Segunda, el director creativo de la agencia de publicidad Porta, Raúl Menjíbar.
El profesional nunca se había referido a la controversia, hasta que esta semana decidió romper el silencio y repasar toda la polémica que golpeó a su agencia de publicidad en febrero de 2016.
Ese verano, Porta tuvo que salir a ofrecer disculpas por un spot publicitario que había hecho para Falabella, uno de sus importantes clientes. La controversia llegó cuando usuarios de redes sociales descubrieron que el anuncio era idéntico a uno que la famosa marca de automóviles de lujo Cadillac había estrenado.
En ambas imágenes, un niño va sobre su triciclo esquivando obstáculos, entre los que se destacan amigas caminando y gente que mueve muebles, además de perros y pelotas.
A la agencia no le quedó más que disculparse por el anuncio, por lo que a través de un comunicado en su página de facebook explicaron que: ‘En relación al cuestionamiento creativo del comercial de televisión que se ha hecho referencia, Porta asume toda la responsabilidad, dado que CMR Falabella nunca estuvo al tanto de esta lamentable copia en la ejecución de la pieza publicitaria’.
El comercial fue bajado de todas las plataformas, Falabella dejó de ser cliente de Porta y Raúl Menjíbar, el hombre encargado de la creatividad en la agencia, no volvió a referirse al tema hasta esta semana en que repasó todo lo ocurrido.
Así, en entrevista con La Segunda, Menjíbar reconoció que el plagio “es algo que va en contra de la esencia de lo que yo he sido”. Además, el director creativo de Porta llevó la discusión más allá del hecho y afirmó que: “A los publicistas nos pagaban por vender la pomada; ahora nos pagan por decir la verdad’.
Para el Consejo de Autorregulación y Ética Publicitaria (Conar), las publicidad nunca debería haber sido utilizada para timar, ya que como señala su código de ética: “la publicidad engañosa es aquella que induce o puede inducir a error o confusión, pudiendo afectar a los consumidores o competidores”.
El Conar también se hace cargo de las imitaciones, definiendo en su código de ética que: “Los avisos no deben imitar la forma, texto, lema comercial, presentación visual, música, efectos de sonido, etc. de otros anuncios, de manera que pudiesen ocasionar perjuicios a los intereses y derechos legítimos del propietario del material publicitario o confundir al público”.
En el mismo documento, Conar también explica que el plagios “infringe la ética publicitaria y utiliza como elemento destacado una idea creativa original que ha sido utilizada por otra empresa, sin autorización de esta última”.
Aquí puedes revisar una comparación con los dos spot publicitarios:
Pedazo de plagio, ¿qué opinan ustedes?#PublicistasChilenos
Publicado por Bien CTM em Quinta-feira, 18 de fevereiro de 2016