Mucho. En realidad, esto es una pregunta retórica, porque la nostalgia vende mucho. Y el marketing suele sacar mucho provecho de aquello. Desde la irrupción de productos como el mini Nes; las zapatillas de Volver al Futuro by Nike, o relanzamientos constantes de franquicias de la infancia (como la reciente Power Rangers o Star Wars) o incluso en otros ámbitos como la nueva versión de The Blair Witch, la nostalgia, es un elemento poderoso destinado a recuperar un poco de nuestro pasado hoy.

Según el estudio denominado Brand Intimacy Report realizado por la agencia MBLM, ahora sabemos que las marcas que más han recurrido a la nostalgia (y han tenido un exitoso resultado) son Walt Disney, Apple, Netflix, Amazon y Nintendo.

Netflix, también lo tiene muy claro. Stranger Things se convirtió en fenómeno masivo apelando a la nostalgia como herramienta principal y está pronto a preparar otras sagas con fuertes raíces en la nostalgia como lo es una basada en el popular videojuego Castlevania, o la presentación de shows como Voltron o una nueva temporada de Gilmore Girls.

Sin embargo, algunos consideran que esta estrategia podría ser a largo plazo contraproducente para la cadena de streaming que a pesar de tener un ingreso anual bruto de 8 mil 830 millones de dólares; y generar mucha programación original mensual, el cerco se va cerrando con la irrupción de nuevos actores en la industria como Amazon Prime, o HBO GO.

Amazon Prime -que actualmente cuenta con 50 millones de usuarios- y HBO -que ha llegado a 134 millones de suscriptores- pueden amenazar este reinado sustentado (en gran parte) por la nostalgia, con programación original como Game of Thrones, o Sneaky Pete en Amazon.Sólo el tiempo dirá si la nostalgia es suficiente. Y el primer indicador, será la segunda temporada de Stranger Things que se estrena el 31 de octubre.

 

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